La Alternativa Bolivariana para América Latina y el Caribe (ALBA), plantea una propuesta de integración diferente a la que traza el gobierno de EEUU con el ALCA y se ha vuelto un dolor de cabeza para Washington, por ello, los americanos no dejan de minimizar los resultados del ALBA en los medios de comunicación del Imperialismo y en la Europa Capitalista, manipulando la información sobre la pérdida de su hegemonía en la región, a sabiendas que la realidad es otra, Han perdido la exclusividad de tomar acuerdos comerciales con países en condiciones desleales para las economías empobrecidas y se les acaba la fiesta, porque el invitado especial ahora se llama Hugo Chávez y la propuesta es el ALBA.
El ALCA (Área de libre comercio de las Américas), iniciativa de Estados Unidos, gestionada desde la Cumbre de Miami de 1994, mueve sus tentáculos sobre la necesidad estratégica estadounidense de consolidar su propio bloque geopolítico, como herramienta directa a su hegemonía mundial, su objetivo es desaparecer el MERCOSUR, contener la influencia europea en la región y camuflar en las negociaciones económicas el intervencionismo militar yankee en América Latina.
Dada esta circunstancia, el ALBA se ha bautizado como populista, por estar encaminada en la reducción de la pobreza y la exclusión social, por no velar por intereses de las Transnacionales, ni por sus tratados de libre comercio (TLC), manjares de empresas que huyen de las barreras arancelarias, y que pretenden la explotación humana, la reducción de los costos, y la competencia desleal con pequeños productores fáciles de ahogar y eliminar del mercado. Es populista también, porque se encarrila sobre las bases de países socialistas, todo lo que huele a Chávez, deben atacarlo (y a poder ser, destruirlo), sin dejar espacios para que los países de la región desarrollen sus aspectos socio económicos y políticos, desde una perspectiva unionista, anti capitalista y de bases sólidas de colaboración entre sus gobiernos.
Lo que está claro es la viabilidad del ALBA para los países que la conforman, poniendo como ejemplo Haití y Nicaragua, dos de los más pobres de América Latina. Ambos firmaron tratados con Venezuela el 29 de Abril del 2007, en la V cumbre del Alba, sobre petróleo: 1) en el acuerdo con Haití, Venezuela suministra directamente crudos y productos refinados, por la cantidad de 14,000 barriles diarios, 2) en el caso de Nicaragua, 27,000 barriles diarios; estos son pagados el 50% de la factura en 90 días, al 2% anual y el 50% restante pagado en un horizonte temporal de 23 años y para variar con 2 años de gracia. Según los acuerdos firmados por Rene Preval y Daniel Ortega con el presidente Chávez, a la vez, los pagos pueden ser realizados mediante mecanismos de compensación comercial, vaya contrato para una economía en desarrollo, ¿es eso populismo, o colaboración directa al desarrollo de estos dos países?, Cada quien hace sus valoraciones.
Revisemos el comportamiento económico actual de Nicaragua, anuncia las exportaciones, en el primer trimestre del año 2010, por la cantidad de 500 millones aproximadamente, que representa un incremento del 34% en comparación con el mismo período del 2009. El centro de trámites de las exportaciones comunicó que al 31 de marzo del 2010 se exportaron 498 millones de dólares, 192 millones mas, que el primer semestre del 2009, cuando se exportaron 376 millones. También Nicaragua anuncia que aspira alcanzar la independencia energética para el año 2013, cosa imposible hasta no hace mucho tiempo, cuando el gobierno estaba en manos de neoliberales, que ven con malos ojos estos acuerdos comerciales con el ALBA, porque responden a intereses Estadounidenses reflejados en el ALCA.
Haití antes del terremoto ya había suscrito contratos con Venezuela y debido a la catástrofe, el ALBA ofreció en la conferencia de la ONU, 2,147 millones de dólares en ayudas para la reconstrucción, ayuda económica que supera la establecida por Estados Unidos y la Unión Europea.
La ayuda suma 2,420 millones, según el diario El Nacional en su sitio Web, tomando en cuenta proyectos que están actualmente en ejecución en Haití, a diferencia del aporte de Estados Unidos, que asciende a 1,150 millones y el aporte de la Unión Europea que asciende a 1,600 millones de dólares, un dato curioso es que Venezuela le condonó la deuda a esta nación Caribeña, que ascendía a 395 millones de Dólares, estos datos a simple vista nos pueden reflejar el comportamiento del ALBA en América.
Haití y Nicaragua han suscrito mas contratos con el ALBA aparte de Energía, en temas como Cultura, Salud, Deportes, Vivienda, Educación, solo es cosa de ver la intención que se refleja en los documentos firmados por los presidentes y se valorará la visión de desarrollo hacia las naciones mas empobrecidas de América Latina propuesta por esta iniciativa, visto mal desde algunos sectores, por nacer de un seno socialista, la historia valorará quién es quién en ayuda social, y las intenciones del ALCA y del ALBA respectivamente. Ahora queda reconstruir Haití y trabajar directamente en el desarrollo económico de Nicaragua y los demás países latinoamericanos.
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada